LA COSPEDAL Y SUS LIMITES.
Ahora resulta que esta señora también tiene límites, lo curioso del caso es que, siempre, los aplica en contra de los demás y nunca los dirige contra ella misma: limita ayudas a la sanidad y a la enseñanza, cierra centros de urgencia, sin tener para en cuenta las necesidades de los demás y otras tropelías que se le conocen, pero nunca, en ningún caso, se le ha visto poner límites a sus propias mentiras, sobre todo en lo que al caso Bárcenas se refiere.
Ahora, no por boca de ella pero si por las de sus "voceros" de cabecera, Gonzalez Pons y Floriano, hay que poner límites a la prensa, no a toda, por supuesto, si no solo a aquella que intenta anteponer su verdad a las mentiras del partido. Otros medios, aunque algunas veces dejan escapar alguna critica, le son afines y a estos no hay que limitarlos.
Sus portavoces, poniendo caras lastimosamente cínicas, anuncian sendas demandas contra El País y contra todos aquellos que difundan referencias a su ex Tesorero y a su relación con el Partido. Pongamos limites a la Prensa, eso si, pero no limitemos ni un ápice caudaloso río de sus mentiras, que esas hay que dejarlas fluir
y ver si con ello "cuelan".
Es lógico, después de más de diez años gobernando, por ejemplo, en la Comunidad Valenciana y recibiendo mayorías absolutas, es lógico, digo, que piensen que todos en España son "bobos" y sus mentes fáciles de captar...y sigamos con la mentira que, a lo mejor logramos que parezca verdad..
Demandas si, pongamos demandas pero dirigidas todas contra el mensajero, al otro, al malo de la película, hay que dejarlo tranquilo, no vaya a ser que abra sus fauces y devore por completo esa honorabilidad que con tanto ahinco tratan de defender...¡Ah!, eso si, y mientras tanto vayamos viendo como es el malo quien interpone demanda tras demanda contra sus ¿antiguos? jefes.
Hasta cuando vamos a tener que soportar que esta gente nos siga contando mentiras y si bien es cierto que gozan de una mayoría absoluta, hubo mucho equivocado aquel día, ya está bien de que instalados en el engaño intenten hacer de cada español un súbdito con tragaderas de "pavo".
¡Ah! y que conste que no pretendo criticar, digo nada más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario