martes, 19 de febrero de 2013

LA MONARQUIA.

Martes 19 Febrero 2013.

                                         LA MONARQUÍA.


Nací en los últimos días de mil novecientos treinta y uno. El Alcalde del pueblo, Barrax, Republicano el, se empeñó en decir que mi nacimiento era un buen augurio y hasta quiso ser mi Padrino; compromisos anteriores de mi padre lo impidieron. Quince o dieciséis días después se proclamó la República. Era, decían, un niño republicano. Pasó lo que pasó y hasta me vistieron de Falangista...Por cierto, que un hijo del Alcalde Republicano, fue el primer Alcalde Franquista.
Por supuesto que no voy a narrar aquí todo lo sucedido hasta llegar al inicio de mi comentario de hoy, La Monarquía, todo ello está, poco más o menos en la Historia y ahí lo dejamos. Murió el Dictador y todos volvimos los ojos hacía quien había sido nombrado su sucesor, a titulo de Rey; sucesor de su poder y General de sus Ejercidos...Y la verdad es que después de ciertas vacilaciones no lo hizo nada mal. Se saltó, en un salto muy torero, su Juramento a las Leyes del Movimiento y todos sabemos, poco más menos, lo que pasó: Una Monarquía Parlamentaria, que representa, pero no gobierna y una Constitución que, con sus luces y sus sombras, nos ha llevado hasta aquí, pasando, no lo olvidemos, por un 23 de Febrero, en el que la Institución que representa la Monarquía, en un quite, también muy torero, nos sacó del atolladero.
Después el Rey no ha sido nadie, nada más que para recibir Dignatarios de otros países, tomar juramento a los nuevos Gobernantes y su Ministros y criar una familia más o menos como todas, pero expuesta siempre en todos los escaparates mediáticos.
También y esto es muy importante, ha sido el "mandado" por el Gobierno de turno para abrir puertas en otras Naciones o simplemente arreglar con su prestigio "descosidos" que otros habían propiciado...En efecto, la Monarquía no manda, pero como Institución todavía es de un inmaculado ascendiente.
Y ahora, los españoles, emulando al mítico Rey Cronos, lo queremos "devorar" de la misma manera que hemos devorado a otros de nuestros valores...Vaya por delante que no soy Monárquico, ni tampoco Republicano, soy, simplemente, un español que, como tantos otros, ha ido saltando, como en el juego, de oca en oca y que quiere vivir en paz los años que le queden. Que alguien cree que la República sería mejor que demuestre; que hay quien piensa que saldría más barata, que haga números y los muestre y si no saben hacerlo, que dejen las cosas como están, recortando si hay que recortar y no metiéndonos en lío de derribar una "cosa" que sabemos, que con sus luces y sus sombras, funciona, para poner otra cosa, de la que tenemos buenas obras como Régimen, pero nefastas pruebas de alguno de sus "voceros".
¡Ah! Y que conste que no pretendo aconsejar, digo nada más.






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