sábado, 13 de abril de 2013

LA CODORNIZ

Sábado 13 Abril 2013.

                                                  LA CODORNIZ.

Éramos en la Pensión ocho o diez Estudiantes, ninguno, nunca o casi nunca, tenía un duro, pero cada semana aportaba cada uno lo que podía y juntábamos lo necesario para comprar La Codorniz, la Revista más Audaz para el Lector más Inteligente, como rezaba su subtitulo y era en realidad.. La leíamos por turno rotativo y una vez vista por todos, buscábamos un hueco y la comentábamos todos juntos. Era uno de los mejores momentos de la semana. 
Era como una bocanada de aire fresco que insuflaba nuestros ánimos para seguir corriendo, cuando hiciera falta delante de los "grises". Era de admirar como un selecto puñado de intelectuales, había que ser muy "listos" para escribir como lo hacían, se burlaban cada semana de las autoridades, profiriendo sus burlas de un modo tal que hasta podían dar la sensación de elogio en lugar de mofa. Aquel parte meteorológico, que no recuerdo en su integridad pero que venía a enunciar que un fresco, procedente del norte, se había instalado en el centro de España, desde donde, con sus inclemencias, hacía la pascua a los españoles. O aquella reseña de un Consejo de Ministros que comenzaba "Reunidos yo y mis amiguetes". Sin olvidar el modo en que llamaban "cabrones" a Ministros y Alcalde usando los frecuentes socavones que asolaban Madrid: "SooCabones". Todo en la Revista exhalaba frescura y, en muchas ocasiones, hasta buena literatura, ya que el sentido del humor no tiene porque estar reñido con lo estético.
Como no podía ser de otro modo, teniendo en cuenta el régimen imperante y sus modos de ejercer la represión, la Revista, cada dos por tres, era retirada de la circulación. Sus páginas repartían "leña" a diestro y siniestro y sus censores no lo tenían nada fácil para encontrar entre líneas, la palabra o palabras que podían molestar a las más altas esferas. Sus portadas, un banco de un parque, en el una pareja y al fondo sobre un árbol un cupido apuntándoles con su flecha y una sola frase: "A que se la tira..."O aquella otra, con varias parejas en diversos bancos, al fondo mucha vegetación y al pie, en mayúsculas y negrilla, "¡Follaje!" y, para culminar este somero repaso, su celebre Raíz Cuadrada: "Bombines es a Bombones, lo que Cojines es a X y  a nosotros nos importa tres X que vuelvan a cerrarnos la adicción".
Por su Cárcel de Papel, en la que ayer encerre a Francisco Camps, pasaron muchos personajes de la época que, por supuesto, tenían mucha mas enjundia que mi encarcelado..
¡Ah! Y hoy ni censuro ni critico, digo y afirmo que Revistas como La Codorniz harían falta en estos tiempos, para dar a nuestros gobernantes de hoy la "caña" que se merecen







3 comentarios:

  1. Enrique ¡que recuerdos!
    Cuesta mucho editar hoy día una revista, y no hay patrocinadores, pero tu serias perfecto para ser su director. Me ha gustado mucho.

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  2. No te engañes, aunque hubiera patrocinadores, La Codorniz sería inviable: hoy el chiste no sería "a que se la tira", sería: Mira como me la tiro...hoy no se prohibe nada más que insultar a los politicos en sus casas y asi las Revistas no son audaces, son procaces...y que conste que no soy ningún puritano.
    De todas formas, gracias por tus buenas intenciones.

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  3. Tu mismo me la acabas de demostrar, solo habia que ir direcatos (Mira como me la tiro) Con todas sus letras y consecuencias y no cómo entonces. Los cajones del obispo, son cajones de nogal. Que cojines que cajones, que cajonazos tendrá.

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