EXAGERACIONES.
Yo, la verdad no se quien fue el desgraciado Inventor de la Inquisición, ni tengo el más mínimo interés en saberlo; me basta con saber que aquí hicimos un uso desmedido de la misma y que, en la mayoría de las veces, fueron las exageraciones las causantes principales de muchos de sus desmanes: Fuimos exagerados exigiendo pureza de sangre y de un modo desaforado aceptamos las delaciones, vinieran de donde vinieran, y sin comprobación de parte.
Ahora, creo, estamos llegando a exageración con el tema de si la Monarquía debe de ser o no la forma del Estado, o si tendríamos que optar por la República. Yo "ni quito ni pongo Rey" pero si emito mi opinión, que no es otra que la de que no debemos caer en exageraciones a la hora de dar o quitar méritos en uno u otro sentido. Almudena Grandes, gran escritora y mejor columnista, a la que admiro profundamente y a la que no dejo de leer en cualquiera de sus facetas, decía el otro día y cito textualmente: "Ni ustedes ni yo tenemos la culpa, pero Felipe de Borbón, será siempre el cuñado de un corrupto..." ¿Es que ahora, cualquier españolito de a pie, va a pagar las culpas de cualquiera de sus parientes? Si esto es así, ya podemos ir tachando gentes de las listas de futuribles y clamando, como un día se clamara en el evangelio, por aquello de que quien este limpio de pecado que tire la primera piedra.
Vivimos y somos de un País en el que una de las frases que más se escuchan es aquella de "La quiere usted con I.V.A. o sin I.V.A..", si el decir sin I.V:A., como todos o casi todos hemos dicho alguna vez, significa "choricear" pocos seremos los elegibles, ya que si no lo hemos hecho nosotros, lo que si es seguro es que no nos libraremos de que haya caído en ello algún pariente, más menos lejano.
Me parece muy bien que quien sea Republicano lo exprese y que incluso lo defienda en todas sus manifestaciones, pero de ahí, a aprovecharse de una crisis Institucional, más o menos provocada, para exagerando conceptos inventar argumentos en favor o en contra de una u otra forma de concebir el Estado, ya no me parece tan correcta. Demos a cada cual lo que cada cual haga y dejemos a los parientes a un lado, que en este "corralito" en el que están convirtiendo España "casi" todos nos "tocamos" algo, en lo que a parentesco se refiere, claro está.
Y como es lógico, mi discrepancia con la Señora Grandes, por lo que considero, una exageración, no obsta para que la siga admirando y, por supuesto, leyendo.
¡Ah! Y que conste que no pretendo criticar, digo nada más.
e de felicitarle por todas estas aportaciones tan interesantes que nos deja día a día, y me gustaría decirle que es usted una de las mejores personas que existen y existirán y un grandioso madafaca.
ResponderEliminarMi mayor satisfación es que, quienes me leís, penseís de mi lo que tu me dices...Ser juzgado como buena persona ha sido siempre una de mis grandes metas. Gracias por leerme y por ese juicio.
EliminarYo soy el primer anonimo, Y te felicito una vez más, tambien (por qué no) a la escritora Almudena Grande. Siempre haces una gran reflexión, y de verdad que no he visto nunca una mente tan clara y tan y tan justa. Un abrazo.
ResponderEliminarHola primer Anónimo. Gracias por tu felecitación y por estar ahí. Que mi mente te parezca clara y justa, a mis ochenta y dos años, es como para estar orgulloso ¡¡¡y lo estoy!!!Un abrazo
EliminarYo tengo tambien ochenta, o mejor dicho terminé mis setenta y nueve, el día dieciseis de enero, así que los estoy cumpliendo, y a pesar de mi mala salud de hierro, pienso cumplir muchos más y trabajar todo lo que pueda, ahora estoy terminando un cuadro sobre la opera de Verdi.
ResponderEliminarBueno, que de tonterías te estoy contando que no vienen a cuento, perdona. Un abrazo.